El Gusto
El órgano principal del sentido del gusto, es la
lengua, la misma que se encuentra en el interior de la boca;
Su
principal función es atreves de los receptores gustativos, que contiene
degustar los alimentos. También
contribuye junto con los labios, los dientes y el paladar duro, a la
articulación de las palabras y sonidos.
.
El gusto, no funciona solo con la lengua lo hace
complementándose con el olfato, de tal manera que se les ha denominado los sentidos
químicos.
La primera impresión del sabor lo tenemos a través del
olfato es decir que los
olores de los alimentos entran por vía aerodigestiva hacia la mucosa olfativa,
Es por esta razón que cuando nos
encontramos con gripe y tenemos tapada la nariz no somos capaces de distinguir
bien los sabores o encontramos los alimentos insípidos.
La lengua...
1. Cuerpo carnoso,
fibroso y móvil, formado por una red de músculos y recubierto por una mucosa.
2. Participa en la
percepción de los sabores,
3. Cumple un rol
importante en la articulación de los sonidos,
4. Ayuda a la
masticación, la deglución y la succión de los alimentos
5. En La parte mucosa de
la lengua, se encuentra recubierta por las papilas gustativas, que son los receptores del gusto.
Papilas gustativas
.-Son pequeños grupos de células
conectadas a fibras nerviosas.
Existen tres tipos de papilas gustativas:
1. Las calciformes,
2. Las foliadas o fungiformes, ambas con función gustativa y
3. Las filiformes que tienen función táctil.
Las papilas están distribuidas en
forma desigual en la lengua y todas perciben los cuatro tipos básicos de
sabores conocidos:
·
amargo, dulce, salado y ácido.
1. En la punta de la
lengua se capta el sabor dulce;
2. El amargo se percibe
en la parte posterior, y
3. Los sabores salado y
ácido o agrio se sienten en los lados de este órgano.
El resto de
los sabores son sensaciones, producto de la combinación de estos cuatro,
estimuladas por los olores emanados de los alimentos que consumimos.
¿Cómo sentimos los sabores?
Los elementos
introducidos en la boca son disueltos por la saliva, esto permite que penetren en las papilas gustativas a través de los
poros que hay en la lengua.
Estas células nerviosas poseen en su
parte superior unos pelillos que dan respuesta
a estas sustancias, generando un impulso nervioso que llega al cerebro a
través de uno de los cuatro nervios craneales, glosofaríngeo, vago,
mandibular y facial. Una vez en
el cerebro, el impulso se transforma en una sensación: el sabor, además, las papilas tienen la capacidad de
captar tamaño, temperatura, textura y
consistencia
Como respuesta a la combinación de varios estímulos, el ser humano es capaz
de percibir un amplio abanico de sabores. La
intensidad de un sabor está relacionada con la frecuencia con que se repiten
los impulsos nerviosos que se envían a la corteza cerebral.
Hay cuatro tipos diferentes, de papilas uno para cada uno de los sabores primarios: dulce, amargo y salado. Y ácido
Las papilas que distinguen estos cuatro sabores
primarios están agrupadas en lugares
especiales,
la parte frontal o punta de lengua recoge todos los sabores, pero aprecia particularmente lo
dulce y lo salada;
Las sustancias acidas se saborean mejor en los lados de la lengua, y
Las cosas amargas hacia la parte de atrás.
Sin embargo, la mayor parte del gusto de los alimentos es reconocida por el
sentido del olfato; cuando la nariz esta obstruida, la comida sabe insípida,
no obstante que las papilas gustativas pueden estar funcionando con perfecta
normalidad.
Los receptores del sentido del gusto no pueden
funcionar a menos que la sustancia de la que ocupan se encuentre en estado líquido. En efecto, la lengua esta cubierta por un liquido especial: la
saliva.